Mari ID ♥

por **Mari** Miér Jul 10, 2013 7:52 pm

Mari

Mari Makinami ▪ 18 {Aparentes} ▪ Vampiro ▪ Homosexual ▪ Tercer Año ▪ Dracheart

DESCRIPCIÓN FÍSICA

El sello es llevado en su brazo derecho, por encima de su hombro, en una pañoleta que lleva amarrada.
Mari es una mujer algo alta para el común de las chicas, llegando a tener que mirar por debajo de su hombro a muchas otras personas a las que conoce. Su cuerpo además es de una complexion media, así mismo, su color de piel es pálido, tirando hacia un leve amarillento, debido a su poca exposición solar.
Los cabellos de la muchacha son de color castaño, llegando este a la altura por debajo de sus omoplatos, siendo estos no tan largos, más suaves al tacto, puesto que ella misma es bastante cuidadosa por cuanto se refiere a su propia estilización. Del mismo modo, sus ojos son de color azulado, contrastando con un rojo carmesí en el instante en el que la muchacha pierde los estribos. La nariz de la adulta es algo respingada, aunque lleve una delicada, casi imperceptible cicatriz en esta por encima de su tabique, debido a un accidente de la niñez. Sus labios son finos, aunque algo secos, por lo que normalmente utiliza su lengua para mojarlos un poco. Sus dientes son delicados, aunque adquieren un aumento de tamaño en la zona de sus colmillos cuando los utiliza para alimentarse de gente.
Los brazos de mari están en bastante armonía, aunque son algo más escuálidos en comparación a la complexión de su cuerpo, sus manos son de un tamaño estándar, así mismo, son bastante frías al tacto, por lo que comúnmente se siente un poco incómoda su propia cercanía.
Acerca de sus hombros, posee una delicada cicatriz debajo del derecho, bajando por su pecho, posee un busto bastante amplio, siendo este uno de sus mayores orgullos como mujer. Posee una cicatriz del mismo modo entre medio de ambos, cosa que no hace sino que enorgullecerle mucho más. Su vientre es algo bastante normal, y no lleva realmente nada especial en aquel lugar. Si acaso, su ombligo está echado hacia dentro. El uniforme de la escuela es algo que realmente le tiene sin cuidado, lo usa única y exclusivamente cuando debe ser estrictamente llevado puesto, y si bien le tiene respeto, realmente es algo que prefiere mantener alejado de su cuerpo, su forma de llevarlo comúnmente un tanto desajustado, con el fin de no causar demasiado alboroto con su figura.
Las piernas de la mujer son algo largas, aunque realmente no son lo suficiente como para que ocupen la mayoría de su altura, su pierna izquierda posee un corte en este, mientras sus muslos están en buena compostura, así mismo, sus pies son algo grandes para el común de las chicas, no al punto de ser grotescos, claro.
Mari Makinami Illustrous – Neon Genesis Evangelion

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

El común de las personas podría decir que es una mujer agrdable, puesto que normalmente es bastante cálida para hablar o referirse a otras personas, aunque realmente no sea alguien que vaya a ser amable con alguien de buenas a primeras. Si bien es una mujer narcisista y bastante egocéntrica, eso es algo que comúnmente prefiere no evitar mostrar a los demás, puesto que su auto-cariño es algo que no a todos les hace en gracia. Sincera y terca, acostumbra a decir siempre lo que piensa y siente, causando problemas normalmente donde quiera que vaya con muchísimas personas, debido a su complicada y afable personalidad, gracias a esto último, puede llegar a llevarse bien con otras gentes, principalmente mediante el hecho de crear lazos con ellas, o porque son capaces de soportar sus palabras, no es para nada tímida con los demás, y probablemente si le agrada alguien se lo diga a viva voz, puesto que cuando se encariña {o no} con alguien, es bastante atenta y cariñosa con ella, mostrando todo lo mejor de sí misma.
Es del mismo modo una persona bastante responsable y firme, no es alguien que transe de buenas a primeras con la mayoría de las personas, aunque prefiere ser ella quien hace amigos, antes de que otra persona sea quien se le acerque, puesto que acostumbra a preferir ser ella quien lleve el control de la situación. De todos modos, tiene un sentido de la superioridad para con los demás, cosa que aflora comúnmente cuando se siente rodeada, normalmente no lo dice, o siquiera lo denota, pero acostumbra a pensar aquello en la mayoría de los casos.
En las situaciones en las que se siente en confianza con otras personas, puede llegar a ser bastante maternal, incluso llegando a ser un tanto hostigosa con sus atenciones en ciertos momentos de intensa efusividad, que son ciertamente bastante seguidos, también es una adulta bastante comprensiva y cálida, teniendo aquel lado bastante desarrollado, puesto que no es alguien que acostumbre a callarse lo que siente por los demás, así, también puede llegar a ser sobreprotectora para con sus seres queridos, teniendo momentos un tanto agresivos para con ellos, debido a su a veces retorcido sentido del amor.
Como último punto, también es una mujer que tiene un lado bastante pervertido, gustándole muchísimo cosas bastante terrenales como el sexo, la pornografía y cosas de esa índole, teniendo un lado increíblemente sádico que normalmente aflora en situaciones de cercanía extrema con otras personas, aunque evita mostrarlo en la mayoría de los casos, principalmente debido a que no es alguien de muchos amigos.

GUSTOS

♥ Vagar y comer.
♥ Llamar la atención.
♥ Los animales y las flores.
♥ Los legos.
♥ La gente poco afable:
♥ Que le rechacen.
♥ La noche y el frío.
♥ El sexo y la pornografía.
♥ La sangre.

DISGUSTOS

♥ En general, otras personas dominantes.
♥ La gente igual a ella.
♥ La monotonía.
♥ Aburrirse.
♥ La soledad, le aterra.
♥ Que molesten a sus seres queridos.
♥ Decepcionar a los demás.
♥ Las injusticias.
♥ Hacer las cosas mal.

HISTORIA

Mari nació hace ya cientos de años, tantos que apenas y la chica puede recordar sus orígenes… La chica pasó toda su infancia en un orfanato perdido en las sórdidas calles de Inglaterra. Como dato extraño, el ritmo de crecimiento de Mari era bastante lento, sobre todo al compararlo con las demás chicos que le acompañaban, sin embargo, debido a la mala administración del local, aquello fue algo que poco y nada sorprendió al personal…. La chica desde pequeña desarrolló un innato carisma, sobre todo por el hecho de que siempre la chica estaba rodeada por otras personas a su rededor.
Los años pasaron, y de un día para otro la chica llamada “Mari” fue adoptada por un matrimonio que no dudó en tomarle como su retoño… Su madre era aparentemente una mujer de rasgos eminentemente asiáticos, así como su padre un sumamente refinad hombre inglés… La cercanía y el apego que la chica desarrolló a la brevedad con aquellas dos personas fue algo casi de otro mundo, era como si el uno estuviese hecho para el otro. El cariño que desarrollaron ambas partes en aquel tiempo fue algo que Mari nunca en su vida había dispuesto… amor sincero de padres.
Ciertamente para una niña tan pequeña el constar con el apoyo de dos personas inamovibles en su vida era algo que reconfortó a la chica durante toda su infancia, sobre todo en los colegios en los que la chica estuvo, la radiancia que desarrolló Mari era algo que parecía contagiar a todas las personas que se le acercaran… aunque claro, su naturaleza de vampiro era algo que logró reprimir durante la mayor parte de su vida.
Los años pasaron, y Mari fue enviada en uno de sus veranos como siempre a las expediciones que hacía la empresa donde trabajaba su padre… Para su mala suerte, aquel sería el último año en el que la castaña podría viajar en su empresa debido a su “edad”, más aceptó aquel destino resignado, dispuesta a pasar sus días al máximo en aquella instancia.
Al poco tiempo de llegada el recibimiento para Mari fue realmente agradable, sinceramente, en absoluto se esperaba aquel tipo de llegada de parte de los niños, los cuales celebraron la llegada de los nuevos de manera bastante cálida… Aunque había algo que realmente le hacía sentir un tanto triste. Una pequeña chica de cabellos rojizos, sumamente arisca, que acostumbraba a quedarse a un costado de las situaciones y rechazar a absolutamente todos los que se le pasaran por delante…

Tal chica no demoró mucho en desaparecer del lugar, y con ello, la curiosidad de Mari le siguió… hasta niveles un tanto insospechados. La chica terminó de una forma u otra, por acabar en el fondo de aquel abismo acuático… Mari sabía nadar, más la duda de si debía en aquel instante el quitarse sus lentes y hacer aquel tipo de tarea a secas era algo que debería haber perturbado su mente… Más no hubo respuesta razonable alguna para que la castaña se echase al agua sin sus gafas, totalmente a ciegas, hasta llegar a la chica de cabellos rojos…. Su mano se apresuró a tomar la ajena, valiéndose de sus frágiles manitas para jalar a la menor hacia la orilla… a duras penas, y con su esfuerzo físico al máximo, logró dejar a la muchacha en aquel muelle, totalmente despierta… Por primera vez en su vida, Mari experimentó una amplia, firme congoja, al ver que aquella muchacha era totalmente incapaz de continuar con su vida… -¡Pégame, háblame, insúltame… Pero di algo! Clamó la chica en aquella solitaria escena, mientras golpeaba con suavidad el frágil pecho de Asuka, intentando ayudarle para poder recibir una bocarada de oxígeno… el hecho de que la menor replicase a aquello, y pudiese darse cuenta Mari de que estaba aún viva le llenó de alegría…. Más al sentir aquel firme abrazo, solo reclamó de ella un gesto de cariño extremo, correspondiendo a tal acción…. Aquella chica se convirtió en su mejor amiga durante lo que duró aquella expedición, y realmente, es una persona que la joven Makinami nunca podrá olvidar…
Los años pasaron, y la joven simplemente mantuvo aquella actitud permanentemente, siendo una chica totalmente entregada y cálida... Sin embargo, siempre sintió que una parte de ella faltaba para sí misma.
Era una mañana cálida cuando un enorme portal apareció en frente de la joven makinami... ¿quien sabía el tipo de cosas que podrían haber en aquel nexo? .... Un tanto indecisa, se apresuró a cruzarlo, encontrándose con un mundo totalmente nuevo....
…El tiempo pasó dentro de la academia Jikan, y realmente Mari logró hacerse su propio espacio en aquel lugar, la casa que escogió para ella fue Dracheart, aunque el hecho de que su regalo para entrar en la casa fuese un dragón fue algo que le sorprendió de sobremanera… Todo aquel lugar era realmente, un manicomio para ella, pero realmente le agradaba mucho más que su anterior existencia.

EXTRAS

Imagen:

Poderes:

Superfuerza: La fuerza física de Mari es superior a la mayoría de los humanos, puede utilizar esta en la mayoría de las situaciones, la cual es lo suficientemente amplia como para poder levantar cosas bastante pesadas con un mínimo esfuerzo, sin embargo, realizar movimientos que mantengan su fuerza física utilizada durante extensos períodos de tiempo, le fatigarían como a cualquier otra persona. Así mismo, para el caso de los objetos pesados, estos le representan un reto un tanto mayor, causándole ciertos pesares, aunque nada que pueda llegar a cansarle de golpe.
Teletransporte: El cuerpo de mari es capaz de desafiar las leyes de la naturaleza a base de pura voluntad, pudiendo viajar enormes distancias de un lugar a otro a través de su poder de teletransporte. La cantidad máxima de movimiento por salto es de 50 metros como máximo. La cantidad máxima de saltos temporales es de uno cada cuatro mensajes.
Debilidades:
Debido a que sus poderes no pueden llegar a utilizarse durante un período demasiado extensivo de tiempo, su cuerpo comienza a deteriorarse paulatinamente con sus actos, comenzando a causarle diferentes hematomas dentro del cuerpo, haciéndole sangrar de diferentes formas, principalmente a modo de tos que acarrea sangre, o vómitos de esta.

Si mari no consigue sangre de un ser vivo durante demasiado tiempo, sus poderes así como su condición física comienzan a mermar, si bien esto no llega a matarle, puede llegar a dejarle en una condición física sumamente demacrada.

Mari Makinami - Evangelion

“Jikan”

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