Ayudando un Poco {Ruriko}

Hacia ya bastante tiempo que iba solo por este lugar, aunque no me desagradaba mantenerme al margen de la vida de las demás personas, a la larga se volvía muy aburrido… Por suerte hace unos días, Ruri me pedía que la ayudara a estudiar con unas materias, yo siempre intentaba evadirla o simplemente, pasar del tema, pero al final accedí a ayudarla, solo por romper mi rutina diaria.

Al final quedamos por la tarde en la biblioteca de Jikan, al terminar las clases del día a día en la escuela, fui directo a la biblioteca en la que había quedado con ella, incluso después de haber acordado una hora, me estaba planteando la opción de evadir esta quedada y marcharme a mi habitación… Pero era Ruri solo por eso no me había marchado a mi habitación, llegue a la biblioteca y entre en aquella gran biblioteca que pertenecía a Jikan, tenia que recordar que en este lugar no se debían hacer escándalos ni cosas de ese estilo que molestaran a los demás, eso era fácil para mi, con solo ignorarles me bastaba.-Asi que… esta es la biblioteca…-

Dije mirando a mi alrededor observándola, era enorme y con una gran cantidad de libros, era la primera vez que la visitaba desde que estaba aquí y… No me parecía nada espectacular, salvo por la gran cantidad de libros pero seguro que era normal… En un lugar tan grande no podía haber pocos libros, suspire levemente mientras dejaba mi bolsa sobre una de las mesas del lugar, después volví a mirar a mi alrededor a ver si encontraba a Ruri por algún lugar, pero no la lograba ver o distinguir ante tanta gente, me senté en una de las sillas a ver si aparecía o simplemente ya estaba aquí pero no la había visto.

Estaba sentado en aquella silla de la biblioteca observando a mi alrededor tratando de localizar a aquella chica, Ruriko, solo esperaba que no me hiciera esperar mucho ya que me había tomado la molestia de venir hasta aquí en lugar de ignorarla y dedicarme a hacer otras cosas, pero hoy me sentía de mejor humor y ya había aceptado. No llevaba mucho tiempo aquí en la biblioteca pero ya se me estaba haciendo fastidioso el tener que esperar, realmente me estaba quedando aquí esperando solo por que era ella, si fuera otra persona no habría esperado ni dos segundos.

En un momento y sin darme cuenta hasta sentir el contacto con alguien, vi como unos brazos rodeaban la zona de mi cuello como un abrazo a la vez que una voz femenina se hacia notar, esa voz yo la conocía, y muy bien para ser verdad.-Llegas tarde pequeña…- Murmure sin ladear siquiera mi cabeza para tratar de verle el rostro a la chica, simplemente deje salir un ligero suspiro de entre mis labios mientras dejaba que ella me abrazara de aquella manera. Al final voltee un poco cuando me libero de su abrazo, se la veía con aquella dulce sonrisa que hacia que se viera muy linda, volví a suspirar levemente esta vez con un poco mas de pesadez mientras ella sacaba unos apuntes a la vez que tomaba asiento.-No. No te disculpo, llegas tarde… Me tendrás que comprar un helado luego.- Dije con un tono de voz despreocupado, como si realmente no me importara que llegara tarde, y tampoco era muy tarde, como mucho había tardado unos minutos en aparecer.

Ni siquiera mire los apuntes y la mire fijamente a ella, realmente la seguía viendo igual que antes, incluso acerque mi mano hacia su cabeza y le moví los cabellos para tratar de cambiarle el peinado, ignorando todo comentario posible que pudiera decirme, acabe sujetándole el cabello como su fuera una coleta.-As probado no se… De ponerte otro peinado o que se yo… Siempre que quedas conmigo apareces igual- Comente algo juguetón mientras seguía jugando con el pelo de ella, y esos comentarios precisamente tenia que decirlos yo que apenas me arreglaba, siempre me lavaba y esas cosas pero no era de esa clase de gente que van perfectamente arreglados o que cambien mucho su aspecto… Si no iba con el uniforme escolar siempre iba con ropa de deporte, era así.

-Realmente… Seguro que es por estudiar?- Con solo mirar por encima los apuntes por el rabillo del ojo, los vi relativamente fáciles, deje de jugar con sus cabellos y adopte una pose un poco mas seria.-Seguro que no es… Por que no podias resistir mas las ganas de verme?- Dije bastante pícaro mientras no dejaba de tener mi mirada fija en ella tratando de molestarla con aquel comentario, solo estaba jugando… Solo esperaba que no se pusiera a gritar en medio de la biblioteca.