¿Danza? [Priv. Mio Tanaka]

Algunos días luego de la apertura del año escolar que seguía, los alumnos organizaron un bailable en el cual tenían la intención de dar la bienvenida a los de nuevo ingreso y ayudarles también a socializar con las personas de la escuela. Se podía considerar algo habitual en las escuelas y era conocido por diferentes nombres como la "fiesta de novatos" o el "baile de iniciación" entre otros nombres menos comunes. No había requisito alguno para asistir y no era obligatorio ir, así que estaba a totalmente libre a los alumnos a hacer lo que les placiera lo cual resultaba en que muchas veces no había mucho baile sino en lugar de eso aprovechaban para simplemente divertirse y pasar un rato agradable. Entre la lista de quienes iban a asistir al evento estaba Souren quien hacía mucho tiempo no asistía a un evento de ese tipo por lo que esperaba poder recordar como bailar adecuadamente y no dejar mal a nadie, por fortuna le fue enseñado a como bailar junto con otras cosas que serían importante para que se adaptara al mundo sin problema alguno. No le resultaba difícil el bailar y había aprendido con gran facilidad y rapidez, así que no se preocupaba demasiado y se mantenía tranquilo creyendo que lo haría bien.

Llegando al evento y como esperaba, no estaba tan poblado como se suponía que debería de estar ya que había algunos que afuera del salón preferían hacer ciertos tipos de maldades y divertirse de diferentes maneras, lo cual le causaba gracia al castaño la diferencia de ambiente que había adentro del salón con el que había afuera de este. - Realmente deben de estarse divirtiendo - pensó en voz alta para si mismo mientras escuchaba los gritos de emoción provenientes de fuera. El estaría entre aquel grupo de no ser porque se había visto obligado de cierta forma a asistir a causa de una pesada broma de sus compañeros donde acepto el reto permanecer dentro del salón todo lo que el baile durara. Era raro ver a alguien de Dracheart en el salón, usualmente las otras tres casas son mas de ese tipo de bailes.

Pronto se dio inicio al baile, comenzando por las palabras de un reconocido alumno del año pasado dando bienvenida a los nuevos y luego anuncio el hecho de que serían asignadas parejas al azar donde varones se formarían al igual que las mujeres y luego marcharían al centro de la pista para verse frente a frente con quienes iban a quedar. - Oh... por alguna razón no me sorprende eso... - ladeo la cabeza un poco y suspiro un poco. En verdad quería estar afuera en ese momento, pero ya que se había metido en aquello iba a terminarlo correctamente sin importar quien fuera con quien le tocara. Siguiendo las indicaciones del maestro de ceremonias, se formó y luego comenzó a marchar junto con los demás al interior de la pista. Ahora la pregunta mas importante que todos se deberían estar haciendo era ¿con quien iban a quedar emparejados?

-¿Un baile de iniciación? -Se pregunto el voz alta al leer el folleto que estaba colgado en el diario mural del instituto, el cual decía que ese día habría un baila donde podía asistir el que quisiera con la misión de que los nuevos alumnos pudiesen integrarse con mayor facilidad en el año escolar y así formar amistades mas rápidamente. La idea de asistir a ese baile le agradaba y parecía ser divertido, pero tenia un pequeño inconveniente: no tenia la menor idea con que tipo de ropa asistir a ese baile. Aunque ese no era su problema mas grave... el verdadero problema era que Mio no sabia bailar. No era porque no le hubiese interesado cuando pequeña o por que sus padres humanos nunca quisieron enseñarle ese tipo de cosas, mas bien porque nunca pensaron que lo necesitaría y porque con todas las cosas que tenia que aprender sobre la Tierra nunca fue algo esencial. Bueno, ahora sabia con exactitud que si podía ser algo importante.

"¿Sera buena idea asistir de todas formas?" Pensó mientras caminaba rumbo a su habitación, todavía dándole vueltas el tema en su cabeza ya que tenia ganas de ir y de seguro seria el salón donde se haría el evento estaría hermoso, ademas de ser una experiencia entretenida conocer nuevas personas... pero tampoco quería hacer el ridículo en los primeros días que llevaba en aquel lugar. Soltó un largo suspiro, rendida "Bueno, creo que lo mejor es no vaya" Sentencio en su mente una vez  que entro en su respectiva casa, caminando por los pasillos de Nymphart en busca de su habitación. Pero mientras mas se adentraba mas escuchaba los murmullos emocionados de las chicas sobre el baile y la posibilidad de conocer a un chico guapo y también lo entretenido que seria, provocando que la pronta sentencia de Mio por no ir al baile se debilitara "No puedes asistir, no sabes bailar.. Sabes que es una mala idea" Se repetía para autoconvencerse y así no comenzara a hacer un berrinche en medio del pasillo porque quería ir al baile y no podía. Pero sus intentos por disminuir sus ganas de ir al evento fueron completamente destruidos cuando entro a su habitación, encontrándose un elegante vestido negro con detalles en color morado claro y celeste encima de su cama con una pequeña nota al lado. Mio se quedo mirando el vestido por un largo tiempo, sin poder creerlo y casi con la boca abierta. Luego de un tiempo reacciono, caminando lentamente hacia el vestido para tomar la nota que estaba al lado la cual decía "Espero que tengas un divertido baile de iniciación. ¡No queremos que ningún alumno nuevo se pierda este fantástico evento! Atentamente, Jikan Highschool".

-¡Voy a ir al baile! -Grito emocionada mientras daba pequeños saltitos de emoción, olvidándose por completado del hecho que no sabia bailar y que seria un poco tonto asistir de todas formas. Pero estaba tan emocionada que ni cuenta se dio de eso y sin esperar mas fue a probarse el vestido, dándose cuenta que no quedaba mucho tiempo para que el gran evento comenzara.

Una hora mas tarde se encontraba ya vestida y lista, caminando a paso rápido hacia el salón aunque esto era producto de lo nerviosa que se había puesto. Su labio inferior comenzaba a doler de tanto mordisquearlo y sus dedos no dejaban de pasar por uno de los mechones de su cabello en un intento por tranquilizarse. Por fin llego a la entrada del salón, deteniéndose unos segundos para respirar profundamente y antes de que se arrepintiera abrió las puertas, encontrándose con una hermosa y elegante vista. A pesar de las pocas personas que habían todo era fantástico y Mio no pudo evitar quedarse mirando el lugar con una gran sonrisa. Tan metida estaba en sus pensamientos, admirando a la gente y como habían adornado el salón que poco se entero del discurso que estaba dando un alumno y que al poco tiempo se dio inicio al baile.. solo se entero de aquello cuando montón de chicas le empujaron hasta formar una fila y luego comenzaron a avanzar hasta el centro de la pista "¿Y ahora que pasa?" Se pregunto nerviosa, mirando para todos lados a ver si encontraba una pista que le ayudara a saber que estaba ocurriendo, dándose cuenta que también había una fila de chicos. Pero su tarea fue interrumpida cuando la fila se detuvo abruptamente y todas las chicas se voltearon a ver la fila de los chicos, para luego escuchar la voz del alumno que antes había estado hablado que informaba que esas serian sus parejas y que disfrutaran el baile. La pelimorada fijo la vista hacia el frente encontrándose con un chico de cabellos marrones y ojos café rojizo que seria su actual pareja de baile, quedándose inmóvil al no saber que hacer ni como actuar en ese momento.

Una vez que las filas terminaron de moverse y voltearon a verse unas a otras, pareció crearse un gran silencio en el ambiente mientras se examinaban mutuamente. En el caso del castaño, parecía ser que estaría con una chica de cabellos violetas con ojos color celeste los cuales tenían una peculiaridad bastante curiosa, además era mas pequeña que el por algunos centímetros. Esto no era lo mas notable en ella aun y cuando era lo que se apreciaba a simple vista sino el hecho de que sus nervios o su inseguridad la habían hecho paralizarse y que fuera incapaz de moverse. Era fácil darse cuenta de esto ya que ambas filas dieron un paso al frente y se reverenciaron antes de que las parejas se tomasen y comenzaran a bailar con la música que empezó a escucharse por el salón dando inicio al baile, pero aquella pelimorada parecía incapaz de moverse.

Al presenciar y percatarse de esto, el castaño se acercó a ella con una sonrisa amistosa en el rostro tratando de inspira confianza, ya que seguramente una de las razones por las cuales se había quedado así era por el hecho de que no sabía si podía confiar o no en su compañero el cual desconocía completamente. Nuevamente hizo una reverencia a ella tratando de que esta vez respondiera aun que igual no le daba mucha importancia a si lo hacía o no. Luego extendió su mano a ella, ofreciendo esta para que la tomara mientras le miraba fijamente a los ojos como si estuviera tratando de analizar los pensamientos de la tímida chica - No tienes de que preocuparte, por esta noche yo bailare contigo - le explicó de forma calmada sin darle importancia a que otras parejas que ya estaban bailando los observaran con un poco de extrañeza debido a que eran los últimos en comenzar a bailar. Señalo con su mirada a su alrededor girando un poco la cabeza para evitar algún acto mal educado de señalar con el dedo - Mira, todo lo que haremos sera lo mismo que ellos, es algo entretenido ¿no? - hablaba calmado y sin prisa alguna con el objetivo de que la chica dejara su parálisis a un lado y se pudiera mover.

En el exterior del edificio, se encontraba el grupo de Dracheart que había hecho que Souren tuviera que entrar a la fiesta. Estos se encontraban observando por la ventana todo lo que sucedía en el interior, pero se enfocaban precisamente en el joven de cabellos castaños con la chica de cabellos purpura frente a el no pudiendo evitar soltarse a carcajadas que si bien no se escuchaban en el interior, podía presenciarse perfectamente por la ventana como se retorcían de la risa y se sujetaban sus estómagos que les dolían por la misma. El chico los noto en un rápido vistazo pero no les presto mayor importancia y se enfoco mas en su pareja.

Tomando su mano la acercó mas a el con cuidado y poso su otra mano libre en su cintura como bien recordaba que se hacía y como también observaba que estaban haciendo los demás. - Mira, asi es como se baila - le explicó y tomó su otra mano para que la pasara por detrás de la espalda. Ahora lo que seguía era comenzar a moverse, solo esperaba que pudiera recordarlo y hacerlo correctamente. - Ahora sigue mis pasos - le dijo antes de empezar a hacer lentos e inseguros movimientos de pie para comenzar a moverse de una forma parecida a como lo estaban haciendo los demás.

Estaba en problemas. En un grave, grave problema. ¿Que haría ahora? Las otras parejas ya se habían presentado con una leve reverencia (Un nuevo método para saludarse, quedándose grabado involuntariamente en su memoria) y ahora se encontraban bailando alegremente por la pista, disfrutando del baile mientras que ella y su pareja eran los únicos que se encontraban de pie en el centro de esta. Nuevamente, su mirada se fijo en su alrededor, buscando la manera de escapar de aquella vergonzosa escena "¿Que hago, que hago?" Se repetía mentalmente mientras que su mirada se posaba en una de las ventanas, fijándose como un grupo de chicos con el uniforme de Dracheart les miraban y se reían hasta no poder mas, notándose perfectamente en como tomaban sus estómagos de tanto reír. Esto solo causo que Mio bajara la vista, mas avergonzada que antes "Sabia que no tenia que venir" Se dijo, dando un paso atrás con la intención de salir corriendo, sin siquiera dar un pequeño vistazo al chico que tenia en frente.. "¿Y para que hacerlo? De seguro tiene que estar aguantándose la risa" Pensó negativamente, un pensamiento que inusualmente pasaba por su cabeza pero ahora la torturaba, haciendo el momento aun peor. Pero antes de que pudiese dar otro paso atrás la voz del chico se alzo entre la música y las conversaciones de las otras parejas, haciendo que la pelimorada levantara tímidamente su cabeza, casi con temor a encontrarse con la burla impregnada en su rostro. Pero en vez de encontrarse con aquello lo único que pudo notar fue un acto de amabilidad, alguien que en vez de reírse de ella le estaba dando una oportunidad.

Solo pudo asentir lentamente ante sus palabras, bajando nuevamente su mirada para fijarla en la mano que tenia extendida... ¿Debía tomar su mano? No parecía como si tuviese otra opción, pero aun así tenia sus dudas..  no por si el chico le estaba engañando y solo quería burlarse de ella, de hecho, estos pensamientos no pasaban por su cabeza, mas bien pensaba que si bailaba con el chico terminaría arruinando aun mas el evento, como también el animo del chico. Mirando de reojo al grupo de Dracheart, algunos que todavía seguían riéndose, otros miraban expectantes su siguiente paso, levanto su mano lentamente para tomar la del contrario sintiendo como esta misma comenzaba a temblar levemente por el nerviosismo "Solo ignóralos" Parecía ser la mejor forma de que tranquilizara un poco mas pero esto parecía casi imposible. Cada cierto rato lanzaba una furtiva mirada hacia la ventana, pendiente de sus reacciones y de sus risas, sintiendo como poco a poco su animo se iba por los suelos. Pero entonces la mano del castaño en su cintura hizo que su atención volviera a fijarse en el, mirándole por segunda vez en la noche el rostro como si fuera un pequeño conejo asustado, confundida por sus acciones pero entonces recordó que de esa manera se estaban tomando las parejas.. ¿Acaso le iba a enseñar a bailar? Su pregunta fue contestada al instante por el otro, como si hubiese leído su mente y ahora ubicaba su otra mano temblorosa en su espalda mientras que con pasos lentos comenzaba a moverse. En un principio, sus pies se negaron a moverse, como si hubiesen echado raíces al suelo pero luego con inseguros y torpes pasos siguió  sus movimientos, bajando la mirada avergonzada.

-P-perdón por arruinarle el baile -Soltó en un murmuro, siendo las primeras palabras que pronunciaba desde que se había dado inicio al baile aunque estas apenas se podían escuchar por sobre la música y las voces de las demás parejas, quienes les lanzaban fugaces y extrañadas miradas al no entender porque recién comenzaban a bailar y de una manera tan lenta y poco elegante- Aunque g-gracias por no reírse de mi -Levanto unos segundos la mirada para posarla en la rojiza del chico, regalandole una tímida sonrisa. A pesar de que aun estaba avergonzada y se sentía mas que humillada, aun existía alguien en esa sala que no le mirara raro o se estuviese burlando de ella y ella no podía hacer otra cosa mas que agradecérselo.

No pudo evitar soltar una sonrisa al escucharla hablar por primera vez, ademas de que lo hacía de una forma tan tímida. Era notable que era la primera vez de la chica bailando, ya que sus pasos eran lentos y no eran muy coordinados a lo que se le añadía el hecho de que temblaba un poco y se demostraba demasiado insegura frente a la situación. El castaño intentaba de alguna forma hacer que el baile mejorara pero parecía ser algo no posible si es que la pelimorada no ponía de su parte. Eventualmente era lógico que le agradeciera considerando también la forma extraña de ver de los demás hacía ellos y además el hecho de que fuera de la ventana había personas burlándose de ellos. - Vaya y yo que empezaba a creer que no hablabas - dijo soltando una pequeña risa casi invisible. Durante el baile lograron acercarse lo suficiente a la ventana donde estaban los alumnos burlándose y Souren aprovecho para cerrar las persianas junto con las otras impidiendo que pudieran seguir observando. - No te preocupes por los que se ríen, tu solo debes de disfrutar tu momento... además no es como si todos supieran bailar o hacer todo perfectamente - le explicó y siguió el baile durante otro minuto, donde después de que este paso la música se detuvo y se anuncio que el baile de introducción había terminado, ahora seguirían diferentes tipos de música para entretener a los presentes.

Apenas termino la música, el castaño también se detuvo volviendo a hacer la misma reverencia que cuando habían comenzado y se estiro un poco hacía arriba quitándose la pereza. - No te voy a mentir, bailas bastante pésimo - termino de estirarse y luego relajo sus brazos. - Aun que se puede entender si es tu primera vez - le dijo directamente sin ningún tipo de rodeos. Lo siguiente era música incluso mas tranquila que la primera e iba destinada a las parejas que se encontraban en el lugar. Ante esto el chico salio de la pista de baile, no sin llevarse a la pelimorada junto con el tomándola del brazo. Localizó una mesa que estuviera disponible y se sentó en esta no sin antes asegurarse de que la chica que le acompañara se sentara apropiadamente, haciendo la silla de ella hacía atrás y luego empujándola un poco. Eran meros modales que hacía casi mecanizado por el hecho de encontrarse en una fiesta elegante donde se acostumbraba a hacer ese tipo de cosas. Las miradas y burlas que estaban clavadas en ellos habían desaparecido por completo.

- Por cierto, soy Souren Konozaki - se presentó a la vez que se sentaba y se acomodaba para quedar apropiadamente en la mesa. No paso mucho tiempo antes de que sirvieran comida a ambos como estaba previsto en la organización de la fiesta.- No sueles venir mucho a este tipo de eventos, ¿no? - preguntó curioso mientras tomaba algo de la comida de la mesa y se servía en un plato comiendo elegantemente imitando al resto de los que estaban ya sentados y comiendo. - Se que no soy todo un maestro ni domino bien este tipo de cosas, pero si quieres te podrá enseñar a bailar para que mejores la próxima vez ¿que dices? - le ofreció dado que no podía evitar sentirse mal de que la chica no fuera a volver a asistir a ese tipo de eventos debido a que carecía de conocimiento sobre como danzar y por tanto sentía que al menos podría ayudarla un poco para que eso no sucediera.