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Sarah N. Abe ID
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Sarah N. Abe ID
»Nombres & apellidos: Sarah Naughton Abe
»Apodo: Zombie girl
»Edad: 16|60
»Sezo: Femenino
»Orientación sexual: Pansexual
»Raza: Zombie
»Año educacional: Primer año
»Casa: Nymphart
»Sello: El sello lo tiene tatuado en la pupila de su ojo izquierdo
»Oficio: Periodista
»Descripción física:
Sarah es extremadamente pálida, más que muchos otros humanos o razas en general, por lo que puede resultar muy extraña al principio. A causa de su piel debe protegerse siempre del sol, por eso mismo siempre se la verá con una sombrilla para protegerse del mismo. Sus ojos son rojos (nada fuera de lo normal teniendo en cuenta las razas que habitan Jikan), lo único que les diferencia de los demás es el tatuaje del sello de la casa en el ojo izquierdo. Al morir con apenas dieciseis años de edad, su estatura se ha estancado y nunca más crecerá, igual cabe el detalle de que no puede engendrar ya que su cuerpo, en teoría, esta muerto del todo. El uniforme escolar lo porta únicamente en el horario de clase, sigue las normas a raja tabla guiada por su inocencia. Fuera de clases usa ropa fresca para mantener su cuerpo frío y no se descomponga más rápido. Su cuerpo es frío, se nota nada más acercarse y tocarla, además de que si se fijan bien podrán notar que no respira en ningún momento. Tiene el pelo largo y de color negro azabache, con el adorno de una flor. Para mantener su cuerpo "normal" debe estar fresca y comer por lo menos una vez cada quince días.
»Descripción psicológica:
A causa de su repentina transformación Sarah es una chica sin recuerdos, desconoce lo que son los sentimientos y esta aprendiendo sobre el mundo una vez más. Sabe perfectamente de que no es una humana normal, no puede sentir dolor, pero su cuerpo sufre, siente un hambre feroz que debe acallar cada quince días o se debilita, el olor a carne humana la vuelve loca y tiene la manía de cazar animales pequeños. Se la puede definir como inocente e ingenua, un alma inocente y virgen que desconoce la maldad del mundo. No entiende el mal que hace, comerse animales en publico o atacar alumnos. Al descubrir que los humanos son seres no deseados, cree tener derecho a comerselos y lo intenta constantemente, pero sus lentos movimientos siempre causan que la "presa" escape apenas ella avanza unos pasos. Le gusta investigar y aprender cosas nuevas, entre ellas hablar, leer y escribir para comunicarne con la gente de su alrededor. Es extremadamente torpe al hablar, le cuesta formar frases al desconocer palabras o el significado de las mismas. Evita a toda costa el contacto con el sol, sabe que le sienta mal, por eso mismo pasea por las noches en los lugares más frescos del instituto y caza animales nocturnos como ratones o aves. Suele cree la mayor parte de las palabras de la gente, confía en ella por muy mala reputación que tengan. También hay algo malo en Sarah, y es su hambre voraz, si tarda más de quince días en alimentarse, se vuelve violenta, cambiando de personalidad, por así decirlo se transforma en una cazadora que no distinguirá amigo de enemigo, no parará de comer hasta sentirse saciada y entonces se arrepentirá. Lo único que sabe de ella misma es su nombre, pero desconoce su vida en general ¿Tenia familia? ¿Amigos? ¿Cómo murió? Son preguntas que busca responder algún día.
»Poder:
› Sentidos desarrollados: Ser un zombie le ha dado la ventaja a la hora de cazar. Su oído se agudizo para localizar presas, su olfato para distinguir viva o fresco de muerto o podrido etc.
»DEBILIDADES:
› Tal como es, Sarah es engañada con extrema facilidad
› El sol hace que su cuerpo se pudrá más rápido, por eso mismo necesita estar fresca.
› Necesita alimentarse cada quince días mínimo o morirá de "hambre"
› Tiene miedo a los gatos (un trauma que sufrió cuando estaba viva y quedó en su "cebero")
› Sufré mucho cuando la gente se burla de ella por ser una zombie o no recordar nada
»ARMA: ---
»HISTORIA:
Nacimiento
La madre de Sarah, una humana que vivía en un pequeño pueblo de Inglaterra, trabajaba como camarera en un bar hasta altas horas de la madrugada. Uno de sus clientes, Thomas Elliot, se obsesionó con ella. Un día de madrugada, Thomas se cruzó con ella en medio de la calle e intentó por todos los medios convencerla de que la dejara llevarla a casa, pero ante las negativas perdió el control y la secuestró. La casa del sujeto resultaba ser una prisión para cualquiera, incluso para Margaret. Allí Thomas abusó sexualmente de Margaret, dando resultado nueve meses después el nacimiento de Sarah. Poco después de nacer, madre e hija tuvieron suerte de ser encontradas por la policía después de la denuncias de los vecinos por los llantos de un bebé. Margaret amaba a su hija, pero el motivo de su nacimiento la asqueaba, tanto que por mucho que le doliera dio en adopción a la niña, dandole de único recuerdo, su nombre, Sarah. Sarah fué adoptada por una familia de clase media incapaz de engendrar hijos pues Trevor Naughton era esteril. Trevor y su esposa, Tamako Abe (de origen japones) se habían casado cerca de dos años sin exito de hijos, los cuales buscaban sin descanso, sin más remedio optarón por la adopción.
Infancia
Desde que tuvo conciencia supo que no era la verdadera hija del matrimonio, si hubiera sido así tendría los rasgos orientales de su madre. Ese echo nunca le molestó del todo, en el fondo, se sentia especial por tener unos padres que la amaban incluso sin compartir la misma sangre. Trevor y Tamako le preguntaban constantemente si no quería saber algo de su madre adoptiva a lo que ella respondía con continuas negativas y la frase: "Ella me dio en adopción por algo, por eso mismo, me niego a saber nada de ella... mis padres sois vosotros por muy diferentes que sean nuestros rasgos". Era verdad que nunca quiso saber nada de su procedencia, le bastaba con sus padres. Más tarde, al cumplir los diez años de edad, Sarah sufrió un revés en su vida, la llegada del "rarito", Sam, su "hermano" dos años mayor. Al tener la misma edad, ambos tuvieron enfrentamientos constantes, para Sarah, Sam, era un intruso que le robaba la atención de sus padres, y Sam, pensaba en Sarah como la favorita, la princesita de sus padres. Sus peleas fueron un quebradero de cabeza para sus padres, pero todo cambio cuando Sam le contó la razón de su estancia allí. El padre de Sam era borracho, su madre sufría esquizofrenia y no atendían al pequeño, un día a su madre le dio un brote e intento acabar con la vida de su hijo bajo la atenta mirada de su padre, que borracho, se burlaba. Después de descubrir el pasado de Sam, Sarah y él se unieron como verderos hermano y se prometieron no abandonarse ni traicionarse por nada del mundo. Un día jugando al escondite con Sam, tuvo la desgraciada idea de ocultarse entre los cubos de basura. Casualmente, allí vivía un gato problematico, arañaba a todo el que se acercaba y ese fue el caso de Sarah. El felino, nada más ver a la niña, se lanzó contra ella provocando varios cortes en su rostro y cuerpo. Desde ese día, Sarah desarrolló una fobia contra los gatos y al verlos se ponía histerica.
Adolescencia y muerte
Sarah gozaba con una adolescencia común, nada fuera de lo normal en la vida de una estudiante de clase media. Sacaba buenas notas, destacaba tenis y salía de fiesta con sus amigas cuando podía. Muchas noches las pasaba con Sam en casa estudiando, jugando videojuegos o saliendo con sus amigos. El día de su dieciseis cumpleaños, Sam y los amigos de Sarah prepararon una fiesta sorpresa en casa de Melissa (su mejor amiga). La fiesta le hizo mucha ilusión. Lo que nadie sabía, era que unos de los invitados, creyendo que sería más divertido, vertió bebida en los refrescos. En cuestión de horas, la mayor parte de los invitados estaban completamente borrachos. Sarah estaba completamente borracha, incapaz de guiarse, caminó por las calles de la ciudad (abandonando a su hermano en la fiesta) buscando su casa. La borrachera le impidió percatarse de que caminaba por la carretera, y por la ropa negra que usaba esa noche, un conductor la atropelló, acabando con su vida al momento.
Descanso, resurrección y Jikan
Al enterarse de la muerte de Sarah, su familia sufre un shock, Sam no para de hacerse responsable por su muerte. Trevor no aceptó la desdichada muerte de su hija, acudiendo a las artes oscuras. Trevor y Tamako se revelaron ante Sam ser un brujo y una miko, con poderes increíbles. Trevor no pudo explicar nada más al jovén, su único anhelo era resucitar a su hija. Haciendo uso de las artes oscuras, acudió a un antiguo hechizo usado por los nigromantes. El poder de dar vida a los muertos, para ello necesitaba arrebatarle la vida a otro sujeto. Tamako decidió ser ella misma la que sacrificara su vida para regresar a Sarah, Trevor era el único capaz de realizar el hechizo y Sam era su hijo también. El matrimonio pensó que todo iría bien, pero por la falta de experiencia de Trevor con la magia de los nigromantes, el hechizo no fue efectivo del todo. Sarah regresó a la vida, pero como un ser hambriento incapaz de saciar su hambre. Temiendo la criatura en la que se había convertido Sarah, Trevor la selló en un ataud de piedra que escondió en lo más profundo del bosque de su antiguo lugar de estudio, Jikan. Al creerse responsable de lo sucedido, Trevor decide acabar con su vida, no sin antes entregarle sus poderes a Sam para que protegiera a Sarah cuando despertara. Cuarenta y cuatro años después Sarah despertó de su letargo, sin memoria, sin conocer su procedencia... Habitó el bosque durante días hasta que fue encontrada por unos profesores que habían ido de excursión con unos alumnos. Sarah ingresó como estudiante de segundo años y se le entregó la mascota de la casa. De rrepente estaba sola en un mundo desconocida, rodeada de muy gente y con la única compañia de un animal.
»Extras:
Gustos:
- La música antigua
- Cazar ratones
- Las frías noches de invierno
- La nieve
- La carne humana (intenta no alimentarse de ella)
- Descubrir y aprender
Disgustos:
- Los ruidos fuertes
- Los olores potentes
- El calor
- No solucionar los problemas
- Que se burlen de ella
- El hambre
Manía:
- Cazar animales
- Mordisquearse el brazo hasta arrancarse un pedazo de carne
Hobbies:
- Coleccionar latas de refrescos
- Trabajar como periodista, aprendiendo así muchas cosas.
»Imagen:
»PROCEDENCIA: Rea Sanka - Sankarea
»Apodo: Zombie girl
»Edad: 16|60
»Sezo: Femenino
»Orientación sexual: Pansexual
»Raza: Zombie
»Año educacional: Primer año
»Casa: Nymphart
»Sello: El sello lo tiene tatuado en la pupila de su ojo izquierdo
»Oficio: Periodista
»Descripción física:
Sarah es extremadamente pálida, más que muchos otros humanos o razas en general, por lo que puede resultar muy extraña al principio. A causa de su piel debe protegerse siempre del sol, por eso mismo siempre se la verá con una sombrilla para protegerse del mismo. Sus ojos son rojos (nada fuera de lo normal teniendo en cuenta las razas que habitan Jikan), lo único que les diferencia de los demás es el tatuaje del sello de la casa en el ojo izquierdo. Al morir con apenas dieciseis años de edad, su estatura se ha estancado y nunca más crecerá, igual cabe el detalle de que no puede engendrar ya que su cuerpo, en teoría, esta muerto del todo. El uniforme escolar lo porta únicamente en el horario de clase, sigue las normas a raja tabla guiada por su inocencia. Fuera de clases usa ropa fresca para mantener su cuerpo frío y no se descomponga más rápido. Su cuerpo es frío, se nota nada más acercarse y tocarla, además de que si se fijan bien podrán notar que no respira en ningún momento. Tiene el pelo largo y de color negro azabache, con el adorno de una flor. Para mantener su cuerpo "normal" debe estar fresca y comer por lo menos una vez cada quince días.
»Descripción psicológica:
A causa de su repentina transformación Sarah es una chica sin recuerdos, desconoce lo que son los sentimientos y esta aprendiendo sobre el mundo una vez más. Sabe perfectamente de que no es una humana normal, no puede sentir dolor, pero su cuerpo sufre, siente un hambre feroz que debe acallar cada quince días o se debilita, el olor a carne humana la vuelve loca y tiene la manía de cazar animales pequeños. Se la puede definir como inocente e ingenua, un alma inocente y virgen que desconoce la maldad del mundo. No entiende el mal que hace, comerse animales en publico o atacar alumnos. Al descubrir que los humanos son seres no deseados, cree tener derecho a comerselos y lo intenta constantemente, pero sus lentos movimientos siempre causan que la "presa" escape apenas ella avanza unos pasos. Le gusta investigar y aprender cosas nuevas, entre ellas hablar, leer y escribir para comunicarne con la gente de su alrededor. Es extremadamente torpe al hablar, le cuesta formar frases al desconocer palabras o el significado de las mismas. Evita a toda costa el contacto con el sol, sabe que le sienta mal, por eso mismo pasea por las noches en los lugares más frescos del instituto y caza animales nocturnos como ratones o aves. Suele cree la mayor parte de las palabras de la gente, confía en ella por muy mala reputación que tengan. También hay algo malo en Sarah, y es su hambre voraz, si tarda más de quince días en alimentarse, se vuelve violenta, cambiando de personalidad, por así decirlo se transforma en una cazadora que no distinguirá amigo de enemigo, no parará de comer hasta sentirse saciada y entonces se arrepentirá. Lo único que sabe de ella misma es su nombre, pero desconoce su vida en general ¿Tenia familia? ¿Amigos? ¿Cómo murió? Son preguntas que busca responder algún día.
»Poder:
› Sentidos desarrollados: Ser un zombie le ha dado la ventaja a la hora de cazar. Su oído se agudizo para localizar presas, su olfato para distinguir viva o fresco de muerto o podrido etc.
»DEBILIDADES:
› Tal como es, Sarah es engañada con extrema facilidad
› El sol hace que su cuerpo se pudrá más rápido, por eso mismo necesita estar fresca.
› Necesita alimentarse cada quince días mínimo o morirá de "hambre"
› Tiene miedo a los gatos (un trauma que sufrió cuando estaba viva y quedó en su "cebero")
› Sufré mucho cuando la gente se burla de ella por ser una zombie o no recordar nada
»ARMA: ---
»HISTORIA:
Nacimiento
La madre de Sarah, una humana que vivía en un pequeño pueblo de Inglaterra, trabajaba como camarera en un bar hasta altas horas de la madrugada. Uno de sus clientes, Thomas Elliot, se obsesionó con ella. Un día de madrugada, Thomas se cruzó con ella en medio de la calle e intentó por todos los medios convencerla de que la dejara llevarla a casa, pero ante las negativas perdió el control y la secuestró. La casa del sujeto resultaba ser una prisión para cualquiera, incluso para Margaret. Allí Thomas abusó sexualmente de Margaret, dando resultado nueve meses después el nacimiento de Sarah. Poco después de nacer, madre e hija tuvieron suerte de ser encontradas por la policía después de la denuncias de los vecinos por los llantos de un bebé. Margaret amaba a su hija, pero el motivo de su nacimiento la asqueaba, tanto que por mucho que le doliera dio en adopción a la niña, dandole de único recuerdo, su nombre, Sarah. Sarah fué adoptada por una familia de clase media incapaz de engendrar hijos pues Trevor Naughton era esteril. Trevor y su esposa, Tamako Abe (de origen japones) se habían casado cerca de dos años sin exito de hijos, los cuales buscaban sin descanso, sin más remedio optarón por la adopción.
Infancia
Desde que tuvo conciencia supo que no era la verdadera hija del matrimonio, si hubiera sido así tendría los rasgos orientales de su madre. Ese echo nunca le molestó del todo, en el fondo, se sentia especial por tener unos padres que la amaban incluso sin compartir la misma sangre. Trevor y Tamako le preguntaban constantemente si no quería saber algo de su madre adoptiva a lo que ella respondía con continuas negativas y la frase: "Ella me dio en adopción por algo, por eso mismo, me niego a saber nada de ella... mis padres sois vosotros por muy diferentes que sean nuestros rasgos". Era verdad que nunca quiso saber nada de su procedencia, le bastaba con sus padres. Más tarde, al cumplir los diez años de edad, Sarah sufrió un revés en su vida, la llegada del "rarito", Sam, su "hermano" dos años mayor. Al tener la misma edad, ambos tuvieron enfrentamientos constantes, para Sarah, Sam, era un intruso que le robaba la atención de sus padres, y Sam, pensaba en Sarah como la favorita, la princesita de sus padres. Sus peleas fueron un quebradero de cabeza para sus padres, pero todo cambio cuando Sam le contó la razón de su estancia allí. El padre de Sam era borracho, su madre sufría esquizofrenia y no atendían al pequeño, un día a su madre le dio un brote e intento acabar con la vida de su hijo bajo la atenta mirada de su padre, que borracho, se burlaba. Después de descubrir el pasado de Sam, Sarah y él se unieron como verderos hermano y se prometieron no abandonarse ni traicionarse por nada del mundo. Un día jugando al escondite con Sam, tuvo la desgraciada idea de ocultarse entre los cubos de basura. Casualmente, allí vivía un gato problematico, arañaba a todo el que se acercaba y ese fue el caso de Sarah. El felino, nada más ver a la niña, se lanzó contra ella provocando varios cortes en su rostro y cuerpo. Desde ese día, Sarah desarrolló una fobia contra los gatos y al verlos se ponía histerica.
Adolescencia y muerte
Sarah gozaba con una adolescencia común, nada fuera de lo normal en la vida de una estudiante de clase media. Sacaba buenas notas, destacaba tenis y salía de fiesta con sus amigas cuando podía. Muchas noches las pasaba con Sam en casa estudiando, jugando videojuegos o saliendo con sus amigos. El día de su dieciseis cumpleaños, Sam y los amigos de Sarah prepararon una fiesta sorpresa en casa de Melissa (su mejor amiga). La fiesta le hizo mucha ilusión. Lo que nadie sabía, era que unos de los invitados, creyendo que sería más divertido, vertió bebida en los refrescos. En cuestión de horas, la mayor parte de los invitados estaban completamente borrachos. Sarah estaba completamente borracha, incapaz de guiarse, caminó por las calles de la ciudad (abandonando a su hermano en la fiesta) buscando su casa. La borrachera le impidió percatarse de que caminaba por la carretera, y por la ropa negra que usaba esa noche, un conductor la atropelló, acabando con su vida al momento.
Descanso, resurrección y Jikan
Al enterarse de la muerte de Sarah, su familia sufre un shock, Sam no para de hacerse responsable por su muerte. Trevor no aceptó la desdichada muerte de su hija, acudiendo a las artes oscuras. Trevor y Tamako se revelaron ante Sam ser un brujo y una miko, con poderes increíbles. Trevor no pudo explicar nada más al jovén, su único anhelo era resucitar a su hija. Haciendo uso de las artes oscuras, acudió a un antiguo hechizo usado por los nigromantes. El poder de dar vida a los muertos, para ello necesitaba arrebatarle la vida a otro sujeto. Tamako decidió ser ella misma la que sacrificara su vida para regresar a Sarah, Trevor era el único capaz de realizar el hechizo y Sam era su hijo también. El matrimonio pensó que todo iría bien, pero por la falta de experiencia de Trevor con la magia de los nigromantes, el hechizo no fue efectivo del todo. Sarah regresó a la vida, pero como un ser hambriento incapaz de saciar su hambre. Temiendo la criatura en la que se había convertido Sarah, Trevor la selló en un ataud de piedra que escondió en lo más profundo del bosque de su antiguo lugar de estudio, Jikan. Al creerse responsable de lo sucedido, Trevor decide acabar con su vida, no sin antes entregarle sus poderes a Sam para que protegiera a Sarah cuando despertara. Cuarenta y cuatro años después Sarah despertó de su letargo, sin memoria, sin conocer su procedencia... Habitó el bosque durante días hasta que fue encontrada por unos profesores que habían ido de excursión con unos alumnos. Sarah ingresó como estudiante de segundo años y se le entregó la mascota de la casa. De rrepente estaba sola en un mundo desconocida, rodeada de muy gente y con la única compañia de un animal.
»Extras:
Gustos:
- La música antigua
- Cazar ratones
- Las frías noches de invierno
- La nieve
- La carne humana (intenta no alimentarse de ella)
- Descubrir y aprender
Disgustos:
- Los ruidos fuertes
- Los olores potentes
- El calor
- No solucionar los problemas
- Que se burlen de ella
- El hambre
Manía:
- Cazar animales
- Mordisquearse el brazo hasta arrancarse un pedazo de carne
Hobbies:
- Coleccionar latas de refrescos
- Trabajar como periodista, aprendiendo así muchas cosas.
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»PROCEDENCIA: Rea Sanka - Sankarea
Sarah N. Abe- Zombie
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Fecha de inscripción : 05/08/2013
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