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Perfecto Desastre [Privado Amane Haradrim]
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Jikan Highschool :: Papelera :: Papelera
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Perfecto Desastre [Privado Amane Haradrim]
~Perfecto Desastre~
Shinji Ajara+Amane Haradrim
Un día duro había pasado, las clases por fin habían terminado y ahora no quedaba más que un par de horas libres hasta la hora de dormir, para la basta mayoría, yo por otro lado había desarrollado el habito de caminar por las noches con suma tranquilidad y solo dormir un par de horas, aun no había llegado el momento en el que eso me debilitara de verdad y pretendía hacerlo mientras no afectara mi rendimiento general pues a decir verdad quería aprovechar lo más que podía de los días, no solo ir a clases y dormir hasta los dos días libres que teníamos, yo tenía tantas horas libres entre todos los días de clase que se podían considerar dos o tres días libres más y para ser sincero eso era genial, no tenía que preocuparme tanto de trabajar en la casa pues vivía en esta pequeña habitación solo con mi dragón.
Hablando de Malek, decidí llevármelo conmigo para variar, al parecer ya había pasado al fin todas las secuelas de aquel ''pleito'' que tuve con Gumiko, incluso mi mano había sanado por completo, estaba como nueva, era un alivio.
''¿Malek?''
''¿Si?''
''¿Te parece la idea de convertirte en un dragón adolecente?''
Yo realmente me había puesto a pensarlo hasta hace poco, sería mejor para él, era muy frágil en esa forma, si no fuera por mi intervención en aquel momento él pudo haber salido lastimado por Samael, si tuviera una forma más grande podría correr menos peligro, tal vez madurar un poco para que no me molestase tanto cuando pensaba.
''Realmente estoy cómodo con mi forma actual, no podría moverme con tanta libertad si crezco más, ¿Y si mi forma de adolecente fuera muy grande? no podría entrar en la habitación y no quiero dormir afuera, así que no''
''Pero así podrías volar y viajar con mayor libertad''
''No me interesa volar, debe de ser cansador''
''¿Lo harías por una galleta?''
''¿Me crees Scooby Doo?''
''¿Tengo que responder?''
''Grrrrr''
''Vale, solo bromeo''
Solía fastidiarle a el también, a fin y al cabo era justo que me vengara después de todas las veces que él se metía en mis pensamientos y me hacía pasar por ''momentos'' con la gente, mas incomodo cuando salía con comentarios de viejo verde cuando hablaba con cualquier chica. A veces que en vez de pensar como dragón mi mascota piensa como viejo sexualmente frustrado.
Ya eran pasadas las cinco y yo abría la puerta a la sala común, para mi sorpresa no había mucha gente, la mayoría eran de los grados superiores, mas tampoco habían universitarios. Lo que deduje era que debían estar preparándose para evaluaciones y eso, por otro lado los que estábamos aquí éramos de uno de los siguientes grupos:
Grupo A: Los flojazos que no quieren estudiar y solo pretenden pasar el día festejando, los Vagos del instituto.
Grupo B: Los que habían estudiado tanto los temas con adelanto que se tomaban uno que otro día libre cuando podían.
Yo me encontraba en un punto medio entre ambos grupos, no soy súper aplicado, pero tampoco pretendo repetir años de estudio en el lugar.
En fin, tome asiento en uno de los muebles y puse a Malek en mis piernas, luego invoque a un minion con las órdenes de que me comprara un refresco o algo de beber frio. Mientras esperaba discutiría que hacer con Malek.
Shinji Ajara- Híbrido
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Re: Perfecto Desastre [Privado Amane Haradrim]
Habitualmente no rondaba la zona común, por la simple razón de que allí las casas mantenían un contacto constante y para Amane, hacer amistad con el enemigo es traición. Pocas veces veía miembros de Haradrim allí pero los más abundantes, sin duda, eran los Dracheart... esos alumnos tan simples e idiotas, les gustaba socializar con la demás basura... incluso tuvo el espanto de ver como miembros de Haradrim tenían relaciones con ellos... ¡Un espectáculo que le costó digerir! La perfección significaba mucho para Amane, hacer amistad con otros alumnos le restaba tiempo que podía usar en otros quehaceres.
Ese día en concreto la peligris disfrutaba de unas horas libres, según sus cálculos, unas tres horas y media de paz. La duda era... ¿Qué haría esas tres horas? Dormir no era una opción, dormir más de lo recomendado era tan malo como dormir menos. ¿Pasear por las áreas verdad? Allí abundaban las parejas ñoñas, con sus besos, abrazos y demás tonterías... Después de meditarlo largo y tendido, optó, por una vez, acercarse a la sala común junto con los otros alumnos.
La aparición de Amane allí era como un milagro de dios, como si la muchacha fuera una deidad en la tierra... y todos la observaban sorprendidos. Sabiendo que todos los ojos estaban clavados en ella, caminó con elegancia hasta uno de los asientos más cercanos. Archer, su preciosa serpiente, reptó por el cuerpo de su ama enroscándose alrededor de su cuello. Ha primera vista cualquiera pensaría que la serpiente asfixiaba a la muchacha pero Archer no apretaba el cuello... era una bufando de piel viva y fría. Amane disfrutaba mucho de la compañía de Archer, la única que aceptaba cerca de ella.
Observaba con resignación la sala común y la gente que allí había; muchos de los alumnos de Haradrim se alejaron de otras casas para ocultar su "traición", tenían suerte de que Amane no tuviera muchas ganas de castigarles... lo haría en otro momento. En menos de lo que canta un gallo, el aburrimiento la poseyó por completo, la sala común era terriblemente aburrida sin una compañía. Resignada, optó por levantarse y buscar un buen libro para leer. Pasó el dedo por el lomo de los libros que descansaban en la única pero gran estantería de la sala. Encontró entre ellos, el libro titulado "El libro sin nombre" de autor Anónimo, el primero de una trilogía interesante. Escrito por humanos, relataba las diferentes historias de diferentes personas pero con el mismo final... Incluía la presencia de vampiros, hombres lobos, demonios... Obviamente, el libro había sido escrito por humanos... No solía piropear y aún menos a los humanos, pero admitía que escribían buenos libros.
Una vez escogida su lectura, Amane regresó a su asiento, ocupado por un Dracheart de aspecto peligroso, quien dice un matón. Amane no toleraba que le quitaran su asiento y menos un tipo con pinta de imbécil como el.
- - Disculpa, te has sentado en mi sitio... por favor, despeja, no quiero que tu olor se pegue... no me apetece que oler a cerdo después.
El insulto no sentó nada bien al tipo en cuestión, los que escucharon las palabras de Amane rompieron a reír, todos menos la misma Amane, que miraba con tremenda seriedad el individuo. Aquel sujeto se levantó furioso encarando a la muchacha.
- Haradrim, palabras venenosas y más viniendo de su líder. Si crees que me asustaras por tu posición, estás lista. - Amane supo que tendría que librarse de el... o se quedaría sin lectura.
Ese día en concreto la peligris disfrutaba de unas horas libres, según sus cálculos, unas tres horas y media de paz. La duda era... ¿Qué haría esas tres horas? Dormir no era una opción, dormir más de lo recomendado era tan malo como dormir menos. ¿Pasear por las áreas verdad? Allí abundaban las parejas ñoñas, con sus besos, abrazos y demás tonterías... Después de meditarlo largo y tendido, optó, por una vez, acercarse a la sala común junto con los otros alumnos.
La aparición de Amane allí era como un milagro de dios, como si la muchacha fuera una deidad en la tierra... y todos la observaban sorprendidos. Sabiendo que todos los ojos estaban clavados en ella, caminó con elegancia hasta uno de los asientos más cercanos. Archer, su preciosa serpiente, reptó por el cuerpo de su ama enroscándose alrededor de su cuello. Ha primera vista cualquiera pensaría que la serpiente asfixiaba a la muchacha pero Archer no apretaba el cuello... era una bufando de piel viva y fría. Amane disfrutaba mucho de la compañía de Archer, la única que aceptaba cerca de ella.
Observaba con resignación la sala común y la gente que allí había; muchos de los alumnos de Haradrim se alejaron de otras casas para ocultar su "traición", tenían suerte de que Amane no tuviera muchas ganas de castigarles... lo haría en otro momento. En menos de lo que canta un gallo, el aburrimiento la poseyó por completo, la sala común era terriblemente aburrida sin una compañía. Resignada, optó por levantarse y buscar un buen libro para leer. Pasó el dedo por el lomo de los libros que descansaban en la única pero gran estantería de la sala. Encontró entre ellos, el libro titulado "El libro sin nombre" de autor Anónimo, el primero de una trilogía interesante. Escrito por humanos, relataba las diferentes historias de diferentes personas pero con el mismo final... Incluía la presencia de vampiros, hombres lobos, demonios... Obviamente, el libro había sido escrito por humanos... No solía piropear y aún menos a los humanos, pero admitía que escribían buenos libros.
Una vez escogida su lectura, Amane regresó a su asiento, ocupado por un Dracheart de aspecto peligroso, quien dice un matón. Amane no toleraba que le quitaran su asiento y menos un tipo con pinta de imbécil como el.
- - Disculpa, te has sentado en mi sitio... por favor, despeja, no quiero que tu olor se pegue... no me apetece que oler a cerdo después.
El insulto no sentó nada bien al tipo en cuestión, los que escucharon las palabras de Amane rompieron a reír, todos menos la misma Amane, que miraba con tremenda seriedad el individuo. Aquel sujeto se levantó furioso encarando a la muchacha.
- Haradrim, palabras venenosas y más viniendo de su líder. Si crees que me asustaras por tu posición, estás lista. - Amane supo que tendría que librarse de el... o se quedaría sin lectura.
Amane Haradrim- Mensajes : 37
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Re: Perfecto Desastre [Privado Amane Haradrim]
La sala estaba llena con alumnos de todas las casas interactuando entre sí, había un cierto ambiente de ligereza pues no sentían la molestia de cargar con esa rivalidad de casas estando aquí, era una pesadez para algunos, ¿Para mí? Me importaba un comino, no era como si no tuviera que estar atento a la guerra que el clan Ajara tenía con mi familia, tanto que planeaban mandar a mi hermano aquí solo porque pensaron que el hijo ''bastardo'' estaría aquí, esos malditos viejos. En fin, lo que quiero decir es que veía pleitos escolares muy bajos para meterme en ellos, claro está no tengo porque estar aguantando lo que la gente quiera, si alguien llegase a molestarme tengo mis métodos de desquitarme y queriendo sonar orgulloso por un segundo, dichos métodos son gran parte la razón por la que casi fui elegido Haradrim, fue más mi dirección el quedar en Dracheart pues no me veía mezclar bien entre tanta gente engañosa y estirada.
-¡Maestro!- Llamo mi pequeño minion, con la bebida en manos -Tenga usted, si no le molesta he de regresar-
-Al vacío, tranquilo, ve- Saque una galleta de mi bolsillo -Llévala y cómela, un pago por el favor-
-¡Gracias maestro!- Dicho eso la criatura se desvaneció en una nube negra.
-''Los tratas muy suave, se supone que son sirvientes para tareas de asesinatos y labores de espionajes heredados por algunos clanes de ángeles caídos y demonios''
''¿Qué quieres? ¿Qué me comporte cuan tirano y empiece a darles latigazos? Pienso que con recompensas la gente trabaja mejor que con el miedo''
Sin embargo, antes de que ese punto se convirtiera en una discusión por horas un leve movimiento en las puertas hizo que todos por igual miraran, al parecer alguien de importancia, pero no lo suficiente para que prestase más de dos minutos a ello, ahora mismo estaba más concentrado en Samael y Gumiko, si bien el último enfrentamiento había frenado su sed de sangre creo que faltaría poco para que comenzara a volver a las andadas, además Gumiko también solicito el que yo le ayudara en algo, así que eso también podría resultar en un problema.
''¿Otra vez piensas en aquella demonio?''
''¿Lo hago muy a menudo?''
-''Demasiado, si me lo preguntas, no fue buena idea el pedir su ayuda en mantenerlo contento, sencilla mente es alguien muy peligroso del que hablamos y no me refiero a Samael, además presiento que ella nos terminara utilizando más de lo que nosotros a ella''
''Si no estuviera tan adormilado en este momento haría que este cuerpo te lanzara por alguna ventana'' Samael se había despertado por el comentado de Malek.
''Tu mantente quieto'' Sin embargo yo le enviaba de nuevo a mi subconsciente.
-''Oe, Shinji un pleito''
Nuevamente, la persona de antes había hecho que las miradas se centraran en ella, al parecer por un pleito esta vez, el chico parecía estar un tanto ebrio e irritable, bueno tampoco que los insultos de la chica sirvieran mucho para mantenerle calmo. Parecía que el chico fuera a empezar una pelea, sinceramente eso sería una pesadez, aunque note que cargaba con un arma encima ¿Ebrio y armado? No dan buena combinación. Haciendo uso de mi magia arcana invoque mi cañón de mana en mi brazo, un disparo fue lo único que utilice, directo a la cabeza por un lado, con una bala de mana suave para no lastimarle, solo dejarlo fuera de combate.
-¿Ebrio y armado? Dios, tu eres ciertamente un imbécil- Voltee a ver a la persona más cercana -Llama a la seguridad del instituto, este idiota va a responder al directo mismo-
El chico rápidamente fue a por la asistencia, el resto de la sala volvió a su ritmo habitual con suma velocidad, todo era igual, excepto por el sujeto K.O en el suelo.
-¿No crees que fue bastante irresponsable de tu parte el llamar a una pelea así?- Dije refiriéndome a la chica -Esto es un instituto, te vendría bien un poco de modales chica-
-¡Maestro!- Llamo mi pequeño minion, con la bebida en manos -Tenga usted, si no le molesta he de regresar-
-Al vacío, tranquilo, ve- Saque una galleta de mi bolsillo -Llévala y cómela, un pago por el favor-
-¡Gracias maestro!- Dicho eso la criatura se desvaneció en una nube negra.
-''Los tratas muy suave, se supone que son sirvientes para tareas de asesinatos y labores de espionajes heredados por algunos clanes de ángeles caídos y demonios''
''¿Qué quieres? ¿Qué me comporte cuan tirano y empiece a darles latigazos? Pienso que con recompensas la gente trabaja mejor que con el miedo''
Sin embargo, antes de que ese punto se convirtiera en una discusión por horas un leve movimiento en las puertas hizo que todos por igual miraran, al parecer alguien de importancia, pero no lo suficiente para que prestase más de dos minutos a ello, ahora mismo estaba más concentrado en Samael y Gumiko, si bien el último enfrentamiento había frenado su sed de sangre creo que faltaría poco para que comenzara a volver a las andadas, además Gumiko también solicito el que yo le ayudara en algo, así que eso también podría resultar en un problema.
''¿Otra vez piensas en aquella demonio?''
''¿Lo hago muy a menudo?''
-''Demasiado, si me lo preguntas, no fue buena idea el pedir su ayuda en mantenerlo contento, sencilla mente es alguien muy peligroso del que hablamos y no me refiero a Samael, además presiento que ella nos terminara utilizando más de lo que nosotros a ella''
''Si no estuviera tan adormilado en este momento haría que este cuerpo te lanzara por alguna ventana'' Samael se había despertado por el comentado de Malek.
''Tu mantente quieto'' Sin embargo yo le enviaba de nuevo a mi subconsciente.
-''Oe, Shinji un pleito''
Nuevamente, la persona de antes había hecho que las miradas se centraran en ella, al parecer por un pleito esta vez, el chico parecía estar un tanto ebrio e irritable, bueno tampoco que los insultos de la chica sirvieran mucho para mantenerle calmo. Parecía que el chico fuera a empezar una pelea, sinceramente eso sería una pesadez, aunque note que cargaba con un arma encima ¿Ebrio y armado? No dan buena combinación. Haciendo uso de mi magia arcana invoque mi cañón de mana en mi brazo, un disparo fue lo único que utilice, directo a la cabeza por un lado, con una bala de mana suave para no lastimarle, solo dejarlo fuera de combate.
-¿Ebrio y armado? Dios, tu eres ciertamente un imbécil- Voltee a ver a la persona más cercana -Llama a la seguridad del instituto, este idiota va a responder al directo mismo-
El chico rápidamente fue a por la asistencia, el resto de la sala volvió a su ritmo habitual con suma velocidad, todo era igual, excepto por el sujeto K.O en el suelo.
-¿No crees que fue bastante irresponsable de tu parte el llamar a una pelea así?- Dije refiriéndome a la chica -Esto es un instituto, te vendría bien un poco de modales chica-
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Re: Perfecto Desastre [Privado Amane Haradrim]
La discusión se termino tan rápido que Amane no supo si estar contenta o molesta por haberle arruinado su "momento" de obvia superioridad. Una bala mágica golpeó al al sujeto dejándolo de inmediato inconsciente al momento. Una voz masculina resonaba por encima de los muchos murmullos y gritos de sorpresa de los presentes. Aquel sujeto, un alumno de la casa Dracheart (los uniformes servían para identificar fácilmente a los miembros y fomentar el odio entre ellas... o eso opinaba). Los presentes volvieron a la normalidad rápidamente, quizás evitando buscarse el mismo destino que el alumno inconsciente. ¿Le importaba aquella situación? En lo más mínimo... lo importante era que por fin su asiento estaba libre y podría leer el libro. Las letras de aquel libro relucían en oro, la taca forrada de cuero era un maravilla al tacto... los primeros ejemplares tuvieron que ser una gozada de verdad. Antes de iniciar su lectura, Amane observó con detenimiento la contraportada cruzandose entonces con la siguiente frase...
"HAGAS LO QUE HAGAS NO LEAS ESTE LIBRO"
¿Un truco para seducir al lector o crear un ambiente de misterio? La curiosidad siempre triunfaría pasara lo que pasara... En el preciso momento en que la muchacha iba a iniciar la lectura, la misma voz de minutos antes la interrumpió... esta vez iba dirigida directamente a ella. Una vez más, ya extremadamente frustrada, cerró el libro... y dirigió su mirada al alumno de Dracheart. El rostro de Amane expresaba un infinito desprecio por la interrupción y una pizca de desagrado por su presencia.
- ¿Empezar? Me limité transmitir una información acertada... que no la aceptara no es mi culpa, es el problema de los cabezas de chorlito... - Aquel tipo tuvo que haberse tragado las palabras, porque Amane estaba de muy, muy mal humor.[color=green]- Primero... se perfectamente que es un instituto, segundo... ¿De verdad te crees el adecuado para reñirme? Has disparado al tipo, y yo opté por la vía diplomática... y tercero... ¿Modales? ¿ME acusas de no tener modales? ¿Sabes quién soy? Lamento comprobar que tu insignificante cerebro no recuerda un simple nombre... Soy Amane Haradrim, líder de la casa Haradrim y si no quieres meterte en un lío, dejame leer tranquila...
Archer siseó en un intento de parecer amenazante, desgraciadamente su diminuto aspecto solo asustada a los animales de menor tamaño. Negaba con la cabeza levemente, exasperada por la ridícula situación que soportaba... ¿Una castigo divino? ¿El alma de su padre se vengaba por no lamentar su muerto? Daba igual la razón, solo quería leer un maldito libro tranquilamente... ¿Era mucho pedir?
"HAGAS LO QUE HAGAS NO LEAS ESTE LIBRO"
¿Un truco para seducir al lector o crear un ambiente de misterio? La curiosidad siempre triunfaría pasara lo que pasara... En el preciso momento en que la muchacha iba a iniciar la lectura, la misma voz de minutos antes la interrumpió... esta vez iba dirigida directamente a ella. Una vez más, ya extremadamente frustrada, cerró el libro... y dirigió su mirada al alumno de Dracheart. El rostro de Amane expresaba un infinito desprecio por la interrupción y una pizca de desagrado por su presencia.
- ¿Empezar? Me limité transmitir una información acertada... que no la aceptara no es mi culpa, es el problema de los cabezas de chorlito... - Aquel tipo tuvo que haberse tragado las palabras, porque Amane estaba de muy, muy mal humor.[color=green]- Primero... se perfectamente que es un instituto, segundo... ¿De verdad te crees el adecuado para reñirme? Has disparado al tipo, y yo opté por la vía diplomática... y tercero... ¿Modales? ¿ME acusas de no tener modales? ¿Sabes quién soy? Lamento comprobar que tu insignificante cerebro no recuerda un simple nombre... Soy Amane Haradrim, líder de la casa Haradrim y si no quieres meterte en un lío, dejame leer tranquila...
Archer siseó en un intento de parecer amenazante, desgraciadamente su diminuto aspecto solo asustada a los animales de menor tamaño. Negaba con la cabeza levemente, exasperada por la ridícula situación que soportaba... ¿Una castigo divino? ¿El alma de su padre se vengaba por no lamentar su muerto? Daba igual la razón, solo quería leer un maldito libro tranquilamente... ¿Era mucho pedir?
Amane Haradrim- Mensajes : 37
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Re: Perfecto Desastre [Privado Amane Haradrim]
-Una información acertada habría sido el transmitir tu deseo de que él se levantara de tu puesto, si querías leer tanto tu libro hubieras simplemente optado por la ruta más sencilla y rápida de salir de tu problema, los Haradrim piensan de la maneras más lógica y que les beneficie más a ellos, lo sé muy bien- Dije pues, admitiendo nuevamente, casi entro en sus filas -Tal y como actuabas buscando pelea sonabas más como el estereotipo Dracheart, impulsivo y boca floja- Aun teniendo el color rojo de Dracheart no me faltaba impulso para menospreciar los rasgos comunes que nos identificaban.
Deshice la invocación arcana y repuse la magia gastada con energía de los espíritus oscuros bajo mi comando. Las personas se nos quedaban bien como si hubiera una pelea frente a ellos, aunque pensando en cómo era la chica posiblemente ya la había. Por su lado parecía que la chica quisiera matarme con la mirada, pero no tenía efecto alguno en mí, más bien podría tener el efecto contrario pues yo solo levantaba la ceja dándole a ella poca importancia.
-Admito que le dispare, lo hice para evitar que te hiciera daño con el arma que cargaba, los alumnos no deberían tener permitido cargar con armas de fuego o blancas en los edificios principales a menos que sean parte del equipo para un club o entrenamiento especial para lo cual debería ser guardadas en las salas correspondientes- Me cruce de brazos mientras soltaba un suspiro -No busco que si quiera te disculpes o agradezcas, sé muy bien que no son de ese tipo de personas, menos después de que te ''provoque''- Deje soltar un tono leve desinterés en mi última palabra -Pero, solo trataba de advertirte, una boca por mas diestra y afilada que sea si es muy floja acaba lastimándote-
Otra cosa que saque de su berrinche era que al parecer ella era la líder de la casa Haradrim, si era por representar sus malos aspectos fácilmente tenía derecho de tener ese título, pero al menos no parecía alguien que atacara por la espalda, me parecía a mí que era más del tipo que mantenía su reputación al máximo y por ende tendían a enfrentar sus pleitos de frente, no necesariamente con violencia física, pero con otros métodos, a diferencia de otras personalidades de esa casa que parecían haber sido sacadas de una película de mafiosos, listos para eliminarte con una apuñalada por la espalda cuando ya no eras necesario o te volvieras una molestia.
-Habiendo visto que te presentaste no me dejas opción de hacer lo mismo- Ya me estaba divirtiendo, mas valía hacer que durara un poco mas -Shinji Ajara, universitario de la casa Dracheart y dentro de poco su sub-líder- Hice una leve reverencia, pero con un tono de respeto un desafío mezclado en ella -Espero que al menos el libro sea lo suficientemente valioso para usar esa mirada tan fría y amenazante-
Deshice la invocación arcana y repuse la magia gastada con energía de los espíritus oscuros bajo mi comando. Las personas se nos quedaban bien como si hubiera una pelea frente a ellos, aunque pensando en cómo era la chica posiblemente ya la había. Por su lado parecía que la chica quisiera matarme con la mirada, pero no tenía efecto alguno en mí, más bien podría tener el efecto contrario pues yo solo levantaba la ceja dándole a ella poca importancia.
-Admito que le dispare, lo hice para evitar que te hiciera daño con el arma que cargaba, los alumnos no deberían tener permitido cargar con armas de fuego o blancas en los edificios principales a menos que sean parte del equipo para un club o entrenamiento especial para lo cual debería ser guardadas en las salas correspondientes- Me cruce de brazos mientras soltaba un suspiro -No busco que si quiera te disculpes o agradezcas, sé muy bien que no son de ese tipo de personas, menos después de que te ''provoque''- Deje soltar un tono leve desinterés en mi última palabra -Pero, solo trataba de advertirte, una boca por mas diestra y afilada que sea si es muy floja acaba lastimándote-
Otra cosa que saque de su berrinche era que al parecer ella era la líder de la casa Haradrim, si era por representar sus malos aspectos fácilmente tenía derecho de tener ese título, pero al menos no parecía alguien que atacara por la espalda, me parecía a mí que era más del tipo que mantenía su reputación al máximo y por ende tendían a enfrentar sus pleitos de frente, no necesariamente con violencia física, pero con otros métodos, a diferencia de otras personalidades de esa casa que parecían haber sido sacadas de una película de mafiosos, listos para eliminarte con una apuñalada por la espalda cuando ya no eras necesario o te volvieras una molestia.
-Habiendo visto que te presentaste no me dejas opción de hacer lo mismo- Ya me estaba divirtiendo, mas valía hacer que durara un poco mas -Shinji Ajara, universitario de la casa Dracheart y dentro de poco su sub-líder- Hice una leve reverencia, pero con un tono de respeto un desafío mezclado en ella -Espero que al menos el libro sea lo suficientemente valioso para usar esa mirada tan fría y amenazante-
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