Habitación #3

Las cosas en la vida del joven Mathis no estaban saliendo tan bien como el esperaba ya que no solo sus padres le habían obligado a casarse con aquella chica tan linda sino que también ella al parecer no le caía muy bien el joven o eso pudo deducir el pelinegro en el transcurso de su viaje en aquel barco donde su futura prometida le ignoro todo el viaje. Luego de un par de horas en aquel barco finalmente el mago había llegado a su nuevo hogar que a primera vista se veía como un recinto bastante adinerado ya que se podía ver a los alrededores distintos tipos de decoraciones que darían envidia a las personas que van a escuelas comunes. Jude había escuchado que en esta escuela también iban magos como él y otro tipo de razas que jamás había visto por lo que el joven Mathis esperaba poder hacer buenos amigos en este nuevo hogar. Fue en ese momento que uno de los empleados del instituto se acercó al mago para explicarle que debía ponerse el uniforme de su casa y luego lo llevaría hasta las instalaciones para explicarle el resto de las cosas como su horario de clases o la habitación que le corresponde.

Una vez que se cambió de ropa, el pelinegro intento llamar a su compañera para que se pudieran ir juntos a su nuevo hogar, pero como era de esperar aquella chica lo ignoro por completo de la misma forma que cuando estaban en aquel barco por lo que dando un gran suspiro el joven Mathis siguió a su guía hacías las instalaciones de Adiashen. – ¿Cuál será la razón por la que ella me odie tanto?  – fue lo que pasaba por la mente del joven mientras iba siguiendo a su guía hasta que este finalmente se detuvo y le dio la bienvenida a su nuevo hogar la casa Adiashen. El interior de esta era bastante elegante y lujosa, algo no  muy diferente al hogar que vivía Jude ya que gracias al dinero generado por la clínica su familia era bastante adinerada aunque al joven Mathis no le importaba mucho su estatus social ya que siempre que podía ayudaba a la gente en problemas sin importar su origen. Luego de que le explicaron el resto de los detalles Jude agradeció al guía por su tiempo y partió de inmediato rumbo a su habitación no sin antes sentirse observado por el resto de sus compañeros de casa que murmuraban todo tipo de cosas en especial las chicas que se decían entre si que el joven era bastante atractivo cosa que hizo sonrojar al joven un poco. Luego de una larga caminata el mago finalmente había llegado al frente de su habitación por lo que dando un profundo respiro decidió hacer ingreso a su cuarto y conocer a su compañero quien sería alguien bastante particular.

– Buenos días, mi nombre es Jude Mathis y seré tu nuevo compañero de…… – no pudo terminar la frase ya que el pelinegro se había quedado completamente paralizado al hacer ingreso ya que la persona que sería su compañero no era más ni menos que su futura prometida y lo que era peor ella se estaba cambiando de ropa por lo que un gran sonrojo apareció en la cara del joven mago que rápidamente intentaba explicarle la situación a su compañera, pero esta no reacciono de la mejor manera ya que cuando se cubrió con una toalla ella comenzó a arrojarle todo tipo de cosas para hacer que Jude saliera del cuarto. Si bien esquivar este tipo de cosas sería algo bastante fácil para el mago, debido a que aún estaba apenado recibió de lleno en la cabeza aquella maleta vacia y los libros de la chica provocándole un pequeño dolor de cabeza, pero con respecto a la lámpara el joven pudo atraparla con sus manos y colocarla de vuelta en su lugar. – N-No era mi intención entrar así sin avisar, pero ya me retiro para que puedas t-terminar de cambiarte – fue lo que dijo el joven aun sonrojado por la situación y procedió a salir del cuarto hasta que ella le diera la señal para hacer ingreso. Luego de que ella se terminara de cambiar el joven mago hizo ingreso a la habitación y se sentó en su respectiva cama para observar detenidamente a la chica ya que el joven en verdad estaba intrigado con la belleza de ella. – Te pido disculpas por lo que ocurrió, pero pensé que mi compañero seria hombre ya que es algo normal que pongan a personas del mismo género dentro de una habitación – fue lo que dijo el joven intentando romper la tensión que se podía sentir en el ambiente ya que se notaba que la rubia estaba bastante molesta por lo ocurrido. – ¿Quién hubiera imaginado que seriamos compañeros de cuarto también? Bueno sé que estas molesta por el asunto de nuestro matrimonio arreglado, pero déjame decirte que no tienes que preocuparte por eso ya que no me pienso casar con alguien a que no amo por lo que espero que podamos comenzar una buena relación cordial como amigos. ¿Qué me dices? – fue lo que le dijo tranquilamente a la chica con una sonrisa bastante sincera mientras le estiraba la mano como señal de paz y que ahora si pudieran comenzar de la mejor forma.

..Solo podia pensar en una cosa....

¿¡Qué demonios se le pasaba por la cabeza a mis padres!? Que me obligaran a casarse era una cosa que aunque me irritaba a niveles cosmicos no queria decir que fuera un hecho , pero de ahi a tener que verle la cara en clases y -encima- vivir en el mismo espacio era excederse, ¡era cruzar la linea! Era como .. Como... Iak, de ninguna manera, pediria cambio de habitacion, o lo que sea, o ya haria amistades aseguro que con cualquier chica mataria por dormir con el asi sea en camas separadas, yo podria escupir en su gran reputacion de "hombre de buen corazon" ... ¿Y a mi que? No le prestaria atencion aunque fuese el mismismo pan de dios...Como se nota que no podriamos hacer buena pareja aunque nos esforzaramos en hacer que funcionara. En lo personal jamas fui partidaria de que la mujer debe ser sumisa.

Sonrei con satisfaccion cuando le cayo de lleno en su cara mi maleta, era una lastima que tomo la lampara, y el deberia dejar de hablar, estaba ahi hablando y yo solo queria que se fuera, no sus disculpas-...YA VETE! -Le grite para que por fin saliera, tire la toalla y aproposito tarde mas de lo que deberia para alistarme, y todo el recorrido mientras me terminaba de vestir fue...-Pero que se le pasaba por la cabeza? Por que debo casarme con el? Ash! Debi lanzarle la maleta llena, acaso es idiota? Por que demonios azules es mi compañero? No les crei capaz de hacer eso!-Seguia refunfuñando irremediablemente, incluso luego sin darme cuenta empece a insultar y a tirar palabras en frances sin importar que el oyera toda mi cantaleta producida por el tan infortunado encuentro. Despues de un rato pense que aunque me encantaba dejarle alla afuera no podia ser tan mala. Me sente en la mesa cruzada de brazos.-Ya estoy lista,tarado- Lo senti entrar, mientraz yo estaba mirando otro lado y poniendo los ojos en blanco, no iba a caer en su famoso atractivo, esta bien las chicas tenian razon, pero no tenia porque admitirlo en frente de el. No soy como las idiotas de cabeza hueca que el esta acostumbrado a cortejar.

Le escuche hablar con tanta amabilidad que creo que me moleste mas, ¿Por que no puede tambien tratarme hostilmente y ya? Primero seria mas facil, y segundo asi le veria algo de caracter, si tan solo lograra molestarle.... -Como sea-Le mencione de manera cortante totalmente indispuesta a mirarle.-Milla es un idiota, grabatelo en la cabeza-La consciencia siempre me mantenia cuerda y cuando le prestaba atencion nunca me desfraudaba, escuche a Jude hablar y hablar, y frunci el ceño.-Ash! Puedes irte? Asi al menos no veo tu cara por tanto tiempo, no podemos ser amigos ni de trato cordial por el simple hecho de que no me caes bien, ¿Lo entiendes? -Me levante, me arregle el uniforme¿Y a mi que me importaba tratarle cordialmente? No le daria el gusto a los culpables de esto, yo pense que todo estaria bien despues de que peleara y ganara, pero no, todo tenia que empeorar, lo ignore todo el viaje por el simple hecho de que no quiero conocerlo lo suficiente para encariñarme demasiado, asi que ignorarlo era la mejor forma de estar bien, me voltee y le dije algo mas antes de irme- Y para tu informacion, aun si fueras el ultimo hombre en la tierra aceptaria casarme contigo, preferiria arrancarme los ojos, idiota!.