Time to work! ;;{Priv. Grey}

La rubia entró en silencio a la estación de policías, no saludó a nadie pues no había nadie realmente a quien saludar, todo estaba tranquilo y oscuro, seguro porque llegó algo temprano para el turno de la tarde. Ella, debido a su edad, era solo una becaria/ayudante que no acostumbraba a cumplir con el rol de policía, eran contadas las ocasiones en que salía a escena, por lo que llegar temprano o tarde era irrelevante mientras cumpliera todas las labores del día. Una de sus principales funciones era el papeleo, todo lo que tuviese que ver con las multas de tráfico, infracciones, archivos, etc, así que se dispuso al orden mientras se servía una taza de chocolate caliente y se acomodaba en un sillón de cuerina negro. Eran las 18;37 de la tarde y no esperaba a nadie hasta que fueran las 19:00 hrs en punto, media hora en soledad le hacían sentir la cabeza baja y los ojos pesados, no supo como ni cuando, pero llegó el momento donde se quedó profundamente dormida, como acostumbraba.

Despertó por el sonido de unas risitas y el eco de una grave voz, notando con sorpresa que ya varios habían llegado. Una de sus superiores no dejaba de balbucear cosas como 'que mona es', mientras que la voz potente y varonil venía del que estaba encargado directamente de ella -No sabía que la estación fuera un lugar para siestas, señorita Krueger- Le regañó, por su parte la rubia movía las manos intentando excusarse y miraba el reloj de reojo, solo eran las 19;20, cosa que decía que ellos habían llegado tarde -Realmente lo siento, superior Usagi-san, simplemente vi la hora y llegué algo temprano, y yo er, yo- Pit no dejaba de balbucear intentando disculparse, mientras que los que la rodeaban se disipaban entre risas y comentarios que hubiesen sido mejor dirigidos a una niña de 10 años. Por su parte el cabo Usagi-san tenía otros planes para la muchacha, así que le hizo callar en medio de su discurso -En el Toxic Building hay algunos problemas, en la disco, ya tenemos a Greyson por esos lados, pero creo que una mano no le vendría mal, ya que estudias allí no creo que te hagan mayores problemas- La muchacha asintió sin chistar y salió de prisa de la estación, huyendo de aquella 'escena vergonzosa' mientras agarraba la hoz con la mano derecha.

Cuando se vio en la calle silbó llamando a su pequeño compañero Shippo y se dirigió trotando al establecimiento mientras se ponía una chaqueta de cuero azul sobre el uniforme, aquél momento refrescaba bastante y aquella ropa de policía era ligera. Frente a la disco había un alborotado tumulto de gente, por lo que logró entender adentro un muchacho intentó robar la caja principal y ahora se rehusaba a salir, teniendo a una mujer de veinteseis años sujeta por el cuello y con una pistola en su cabeza -La gente de hoy en día realmente está desquiciada- Le comentó al pequeño Shippo que veía con desinterés la escena y le asentía a su dueña. Se puso en marcha casi al trote y buscó con la mirada al que era su compañero de trabajo, saludandolo con la mano libre y una gran sonrisa al verlo finalmente -¡Grey-kun! Buenas tardes- Inclinó ligeramente la cabeza y mostró una curvatura de labios infantil a la vez que cerraba los ojos -Me dijeron que estaban algos complicados ¿Algo en que podamos ayudar?- A su lado estaba su zorro dispuesto a empezar 'la acción' y ella continuaba portando la gran hoz negra que la duplicaba en tamaño.

Eran las 19:00 y era mi turno de patrullar los alrededores de Toxic building cuando las cosas empezaron a ir de mal en peor, la noche estaba calma, poco viento y hacía un poco de frío pero era así como le gustaba, no era que su chaqueta azul de policía le sirviera de mucho era mas decorativa que una verdadera prenda de vestir, pero al menos una decoración que te abría muchas puertas y privilegios mientras te cerraba otras, pero ahora estaba deteniendo una pelea callejera con solo unas palabras y si insignia, los dejé ir con una advertencia pero si lo volvía a ver se los llevaría a la comisaría, según las reglas debería habérmelos llevado pero simplemente haciéndose sonar los nudillos lo pensaron dos veces antes de retirarse.

Aquello no había sido problema alguno pero cuando llegó al bar en si no le gustó lo que estaba viendo y su pasada taza de chocolate caliente definitivamente no tenía el suficiente azúcar, era una situación de rehén, lo primero que hizo es pedir a la gente que se aparte, mientras menos personas de por medio mejor pero su estúpida curiosidad morbosa los llevaba a acercarse mas y más confiados en que al ser policía podría mantenerlos seguros, en momentos como estos deseaba tener aquella cinta con el prohibido el paso para mantener a estos idiotas alejados para que pueda hacer mi trabajo, llamó por radio a la estación de policía deseando que alguien llegue rápidamente, poco después tuvo un poco de alivio pasajero al ver otra chaqueta azul pero al darse cuenta de quien lo tenía puesto sus esperanzas cayeron, era Krueger la nueva "mascota" del departamento quien era joven incluso para los estándares humanos lo cual era decir mucho estaba ayudarle, así que mejor que sea útil como sacando un gran plan o un superpoder detrás de esa sonrisa infantil no era de demasiada utilidad excepto para distraer a la gente con su apariencia infantil, lo que casi sonaba un plan.

-Buenos tardes y si estamos complicados , tenesmos una situación de rehen, estas cosas son delicadas y es la primera vez que estoy en una, así que si quieres puedes ayudarme de dos maneras o tienes algo para aturdir al asaltante o se ocupas de la gente para que pueda intentar hacer mi trabajo, estos sujetos no sabes lo que les conviene-

En el acto un disparo se escuchó, al mirar al maleante de unos 17 años humanos de edad con un peinado punk tenía su arma humeante en su mano apuntando al techo antes de volver a posarse en la cabeza de la mujer quien estaba llorando del miedo.

-Escuchenme bien, quiero un vehículo con el tanque lleno o la chica muere- reclamó el delincuente, esta información inmediatamente la transmití a la central quien estaba mandando a la gente pero mientras antes se terminara mejor.

La rubia infló una mejilla cuando notó que el que era su superior había dicho mi trabajo, sintiéndose algo despreciada por su baja estatura y aspecto infantil, entonces levantó ligeramente la vista cuando escuchó el disparo y la sarta de tonterías que exigía el muchacho -El realmente tiene miedo, su voz es temblorosa- Observó la muchacha mientas sus ojos bailaban de aquí para allá en la escena del crimen, dando de un punto a otro -Creo que tengo algo que puede ayudar, es humano así que paralizarlo sería algo fácil, puedo producir veneno- Su mirada seguía centrada en otras cosas, como la mano que tenía agarrada a la muchacha, la ropa del asaltante, el arma que traía consigo, todo era importante si se trataba de una situación de rehenes -Es zurdo o ambidiestro, sostiene a la mujer con la mano derecha, por lo que debe poseer bastante fuerza en ese brazo, en el caso de que sea zurdo su puntería con la mano izquierda debería ser menor por un 70% al menos, en caso de que pueda ocupar ambas no sacamos nada con neutralizar alguna de sus extremidades- Acotó dando pequeños pasos cada vez más cerca de la escena, rodeándolo.

-Es jóven y seguramente es la primera vez que lo hace, ya sabes, el robo de dinero- Suspiró observando el piso y se agachó en cuclillas, intentaba ver que había tras él, nada más que un maletín negro donde seguramente había puesto la mercancía -Dudo que lo más importante para él sea el robo, este lugar es fácil de asaltar, estos deben ser sus cinco minutos de fama- Alzó la vista a Grey y lo analizó por unos momentos, ella había pasado años entrenando para ser espía y otros en completa soledad para ser una guerrera, podía armar rompecabezas como estos en menos de lo que se chasqueaba la lengua, aún así no tenía experiencia con el 'mundo moderno' y esperaba alguna crítica o asentimiento de su superior. Se puso de pie y rodeo nuevamente la estancia, buscando los puntos de huida que tenía el muchacho -Solo poseemos una puerta delantera y la de la basura que da a un callejón abierto atrás, si sale por este último creo que sería conveniente dar la orden de cerrar las calles que abajo interceptan con esta vía de escape, en caso de que salga por el frente puedo hacer algo, pero necesito tiempo- Sin esperar una aprobación por parte del chico silbó para llamar a Shippo. que vagaba por allí.

El zorro subió ágil hasta el hombro de la muchacha y espero las ordenes de esta -Busca puntos ciegos en los edificios cercanos, cuando haga 'lo mío' asegúrate de que nadie toque los hilos- El pequeño animal asintió y se fue corriendo como alma que lleva el diablo. Pit volvió el cuerpo y se balanceó unos momentos mientras escuchaba los gritos -Me gustaría formar parte de las fuerzas especiales algún día- Un comentario sin sentido, pero que entraba en la conversación -Verá, mi sangre tiene altas cantidades de toxinas que es como el veneno de las serpientes, si inyecto poco solo lo paralizaré por unos momentos y en un golpe limpio, pero si alguien más toca los hilos de sangre que salen de mi cuerpo podrían sufrir las mismas consecuencias o peores- Le pareció prudente explicar lo que estaba apunto de hacer, escuchó el aullido de Shippo provenir de una esquina cerrada y se mantuvo de pie erguida, esperando instrucciones.

"No me digas" comenté sarcásticamente en mi mente cuando dijo que tenía miedo, lo único bueno es que ahora la gente se había dado cuenta que era peligroso y por lo tanto tenía que mantener la distancia.

No era momentos para informarle que también podía ser que por problemas de visión tenga que usar la otra mano o porque de esa manera tenía su mano útil para poder hacer algo como poner el dinero en la maleta lo mas rápidamente posibles, después de todo si tienes un arma no tienes que preocuparte por dar en el blanco, con estar cerca es suficiente, con respecto al dinero ella tenía la razón los humanos no necesitaban realmente ese dinero porque el director se encargaba de todo para que estén en buenas condiciones, seguramente por el hecho de que era su error el hecho que estén aquí -Mi puesta esta en los cinco minutos de fama- le respondí

El hombre continuó con amenazando con que la iba a matar mientras la pobre rehén lloraba desconsoladamente del miedo, todas parecía depender de la niña y dios sabe que tiene o si en verdad tiene un buen plan, porque si algo se iba al diablo la culpa sería de ella.

De mi pecho se escuchó la respuesta de la comisaría, un equipo estaba cerca y llendo por detrás rápidamente recordó lo que la chica le había dicho -Este es el oficial Greyson, a las unidades detrás del bar, la oficial Krueger tiene un plan, si ven a un zorro negro y rojo obedescanlo y no disparen, repito zorro negro y rojo obedecer, no disparar- repitió dándole la espalda al sospechoso quien no le dio importancia al pequeño animal ni pudo ver lo que estaba haciendo.

En el callejón cercano estaban un grupo de cinco hombre con pesada protección y armas listos para la acción, al tratarse de un humano tenían instrucciones de usar munición no letal, la recibir la información de la central refunfuñaron un poco pero siguieron las instrucciones , solo esperaba que el zorro y su responsable sepan lo que hacen.

OFF: Lamento la tardanza, aquí te dejo para que hagas lo que sea que estabas planeando